Artistas Amanda Gutiérrez, Ana Santos, Antonia Giron Intzin, Claudia López Terroso, Ingrid Hernández, Juana López López, Luna Maran, Marta Toledo, Pascuala Hernández, Patricia Martín, Refugia Guzmán Pérez y Tania Candiani
Curaduría de Lucero González
escrito Lucero González
Esta exposición ha significado un reto importante para el Museo de Mujeres Artistas Mexicanas. Convocamos a doce fotógrafas de orígenes y culturas diversas: tzotzil, tzeltal chol, zapoteca, zoque, mixteca, chatina y mestiza para tender un puente desde distintas experiencias y representaciones sobre el tema de la migración y sus múltiples expresiones e imaginarios.
Las mudanzas suponen cambios, desplazamientos, tránsitos, rituales de paso. El muro, la valla, el tren, el río son obstáculos para saltar o cruzar. Migrar también es la metáfora de la posibilidad de construir una vida diferente. Las fronteras son redefinidas o reinventadas por las artistas participantes.
Tenemos en esta muestra prioritariamente a fotógrafas indígenas con una visión diferente que parte del interior de sus familias y comunidades para darnos su punto de vista. Ya no es una mirada externa sino una conexión con los sujetos fotografiados, acompañada de una narración visual y textos escritos en su lengua. Esas miradas son de Antonia Girón Intzin, Juana López López, Pascuala Hernández Díaz y de Refugia Guzmán Pérez.
Otras artistas construyen sus portafolios desde su propio yo de migrantes, ellas mismas reconociéndose en los otros como en un juego de espejos para encontrarse con similitudes y diferencias entre estar ilegal o legal con la posibilidad del retorno a su lugar de origen. Ellas son Amanda Gutiérrez, Luna Maran, Claudia López Terroso y Ana Santos, de Oaxaca. Nos parece importante el abordaje desde la frontera sur hasta la del norte para seguir los pasos de las migrantes que llegan a Chicago y Nueva York y otros desplazamientos transfronterizos. Martha Toledo lo hace en el cruce de Ixtepec, Patricia Martin en Brooklyn, Ingrid Hernández y Tania Candíani en Tijuana. Testimonios de latinas que ven a la Ciudad de México como el lugar de sus sueños y el deseo de su realización. Lugar de atracción y rechazo. Nos muestran un tiempo y espacio trastocado.
Esta exposición es un punto de partida para abordar una visión inédita donde las mujeres indígenas hacen uso de las cámaras y las migrantes documentan su propio viaje.
Este proyecto ha sido posible gracias a los apoyos entusiastas de Mario Bronfman, director de la Fundación Ford México y Centroamérica, Ana Luisa Liguori y de Teresa Rodríguez Directora de UNIFEM México. Agradezco también el apoyo de la Universidad del Claustro de Sor Juana por recibirnos en su recinto, a Sandra Lorenzano por aportar su texto para el catálogo y a Ximena Labra por el diseño editorial. Asimismo resultó fundamental la presencia de Fortaleza de la Mujer Maya FOMMA, en Chiapas, al colaborar en esta exposición y de Carlota Duarte y Maya Haviland del Archivo Fotográfico Indígena por facilitar y compartir el encuentro con las fotógrafas chiapanecas. Agradecemos de antemano la hospitalidad del Centro Fotográfico Manuel Álvarez Bravo que nos recibirá en sus instalaciones en marzo del 2010, año en que esta exposición viajará por otros museos del país y posteriormente se presentará en las ciudades estadounidenses de San Diego, Chicago y Nueva York.